domingo, 25 de enero de 2009

Crisis

Estoy retomando estos dias varias negociaciones, que quedaron aparcadas el año pasado, con diversas empresas gallegas de varios sectores. Retomando es un término optimista. Tratando de retomar se hacerca más a la realidad. Hace años que tantas horas de teléfono dieron tan pocos frutos inmediatos.
En algunos casos se respira pánico (fundado), en otros paranoia (absolutamente infundada) y en el resto, precaución máxima (prudencia le llaman). Pero nadie mueve un duro, ni hace intención de moverlo a corto plazo. Ni a medio, me temo.
Esto es preocupante por que cierra un círculo microeconómico vicioso, que tiene el peligro de dejar de ser coyuntural para pasar a ser estructural.
Si el dueño de la tienda de zapatos (que algo de dinero tiene) no saca a su familia a comer fuera, el dueño del restaurante deja de contratar los servicios de mi empresa (amén de prescindir de los empleados extras de fin de semana). Mi empresa me paga menos variable (eso, si no me chimpla a la calle un día de estos) y yo tengo que estirar los zapatos que tengo.
Mientras, el gobierno, con el dinero de todos nosotros (el del zapatero, el del restaurador y el mío, entre otros) acude en rescate de unos bancos que se encuentran como están por mera avaricia y falta de previsión. La excusa, que éstos trasladen esa inyección a las familias y a las pequeñas empresas.
Pero ni las familias ni las pequeñas empresas están accediendo a ese dinero. Se quedó en el camino, cubriendo algunos agujeros que tenían nuestros benefactores banqueros.
Es triste, pero esto demuestra que los políticos no dejan de ser meros instrumentos de quienes realmente gobiernan el planeta. Los grupos de capital.

5 comentarios:

Unknown dijo...

es asi...mmmmmm....esto me parece k lo recuerdo de algun lado.....el kaos seria muy muy grande si toka el tema social...

Anónimo dijo...

Si el dinero que se les ha dado a los bancos llegara sin control a las familias y a las empresas , caeríamos en una inflación galopante bestial. Y eso es lo que no queremos, ni ellos, ni nosotros. Un saludo, sigue así con el blog, me gusta.

Albert Tortajada dijo...

No se trata de provocar una vorágine consumista. Pero algo hay que hacer para que corra el dinero algo.

alerta dijo...

El dinero que se ha dado (falso) a los bancos llegara sin control (???) a las familias y a las empresas.

Lo que tienen que hacer los bancos es prestar dinero a aquellas entidades o personas que tienen posibilidad de devolverlo, bien porque cuentan con un respaldo detrás ó por tener una idea que se presupone rentable en el futuro. Si se lo prestan (que no se lo dan) a personas o entidades que no estan en esas condiciones es que no han hecho bien su trabajo y no merecen ser rescatados.

No me gusta la cantinela, de que por el bien común ó por evitar un mal mayor hay que ayudar a todas las cajas y bancos sin distinción. Coño que se investigue quien ha hecho los deberes y quien no, que se depuren responsabilidades, que salgan todos los trapos sucios a relucir.

Deseo díficil de que se cumpla, cuando especialmente las cajas de ahorros son unos nidos de clientelismo politico de todos los colores.

P.D. La crisis va a ser larga y profunda y aquí no hay Obama al que agarrarse.

Albert Tortajada dijo...

Se sigue manteniendo la desconfianza entre los bancos. Se han vendido y revendido entre ellos activos financieros que ahora ni saben lo que valen. Es como el juego de la "peste" o el "tu la llevas" a los que jugábamos de pequeños. Con la diferencia de que nadie sabe quien la lleva. O si la llevan varios...
Lo peor de todo es que hipotecas que técnicamente eran seguras (empleados fijos afectados ahora por las ERE´s)ahora dejarán de serlo, lo que no ayudará demasiado a recuperar esa confianza.
Agarrémonos bien, que el estancamiento será largo...